En la vida a causa del destino nos encontramos y nos cruzamos con personas, con gente que cambia nuestras vidas como para bien como para mal. Están esas amistades que empiezan con una sonrisa , ese tipo de sonrisas que nos hacen sentir bien. Esas amistades que empiezan con una mala mirada por el simple echo de juzgar sin conocer, pero que después resultan ser grandes personas. Están esos que están cuando te necesitan, los que están siempre, los que se acuerdan de vez en cuando.
La vida es dura y también nos encontramos con personas que no hacen bien, que simplemente nos 'nublan' el día, pero es así no todo es color de rosa digo yo. A esa gente no hay que contarla, hay que contar a esos que están siempre y que se preocupan por nosotros, esos que forman parte de nuestra vida.